Es cada vez más notorio que el número de personas que está buscando acompañamiento terapéutico, ha aumentado en el último tiempo, especialmente a partir de la Pandemia del covid-19. Si sumamos a ello, las crisis políticas, sociales y ecológicas que están aconteciendo en nuestro planeta; podríamos entender que a nivel individual, también se estén expresando movimientos intensos; y con ello, esté aumentando la necesidad de solicitar colaboración, de personas que acompañan a otras personas a través asesorías o procesos terapéuticos.
Muchos sabemos que hay un gran potencial en las crisis, puesto que a través de ellas nos invitamos a detenernos, atendernos y ajustar lo necesario para avanzar. También a reconocer el gran poder que tenemos para crearnos y recrearnos permanentemente, como seres individuales y también colectivos. Si bien es cierto, que a veces las crisis nos pueden provocar incomodidades, a largo plazo suelen mostrarnos que contenían mensajes acerca de las transformaciones necesarias, para vivir una vida más plena, en mayor coherencia con la propia esencia, nuestros ciclos y los ciclos de la vida.
Actualmente, existen muchas ofertas de terapias, terapeutas y agrupaciones. Esto ha aumentado a partir del interés de la gente por la Medicina Complementaria, que va dando respuestas para abordar nuestras dimensiones de manera integrada (física, psicológica y trascendental). Sin embargo, también es real que esta gran cantidad de oferta terapéutica, puede en algunos casos generar confusión a la hora elegir a un* buen Terapeuta.
Es importante mencionar que por «un* buen* terapeuta» me refiero a quien, además de conocimientos y experiencia, se ha entrenado en aspectos éticos y se ocupa de desarrollar una coherencia personal para el ejercicio. Quien acompaña a sus consultantes con su integridad también puesta al servicio. Lo anterior importa pues, nada más y nada menos, que se compartirá con él o ella aspectos delicados de la propia vida y las consecuentes posibilidades de una transformación.
A continuación te ofrezco una pequeña guía, que espero sea de utilidad frente a la interrogante de cómo reconocer a «Un* buen* terapeuta»:
Lo primero que te sugiero para identificar que un*Terapeuta sea adecuad* para ti, es escuchar tu propia intuición. La intuición funciona principalmente cuando atiendes lo que dicen las sensaciones de tu cuerpo respecto de algo o alguien (por ejemplo, lo que te ocurre al ver su fotografía, su enfoque terapéutico, su voz, presentación, etc.). Es cierto también que cuando andamos en tiempos de vulnerabilidad personal, podríamos poner en duda nuestra propia intuición. Por ello, algunos criterios para tomar en cuenta al momento de decidir podrían ser orientadores. E incluso pueden ser útiles para chequear si actualmente estás en una relación terapéutica beneficiosa.
¿En qué te puedes fijar?
Su curriculum
Puedes investigar acerca de su formación y experiencia laboral en relación a la terapia o herramienta que ofrece. Observar en sus redes sociales laborales (linkedin, página web, Instagram, etc). Leer sus ideas y recorrido laboral. No hay que olvidar que lo académico y la experiencia laboral, no necesariamente garantizan la calidad humana ni vocacional del o la terapeuta, sin embargo es un factor importante a considerar junto a los factores que siguen.
Referencias
Varias personas piden referencias a sus conocidos o familiares acerca de un terapeuta o terapia. Esto suele ser útil, ya que puedes obtener una opinión acerca de la persona, calidad de atención y los resultados percibidos. Sin embargo, es importante considerar, que lo que a algunos les puede servir, a otros no. Por ello incluso frente a todo eso, escucha tu intuición.
El primer contacto
Este punto es importante para saber si vas por buen camino. Puedes llamarle directamente, escribirle un wsp, un email para contactarle. Algun*s terapeutas publicitan sus formas de contacto preferidas. La forma en que acoja tu solicitud es un buen indicador. Si bien un terapeuta puede no estar 100% disponible para contestar de inmediato una solicitud, dará una respuesta lo más pronto, o te avisará dentro de qué tiempos lo hará. Considera la forma en que de responde y su disposición a enviarte la información de su servicio, si se lo pides.
Buen Trato
Ten en consideración que durante la(s)atención(es), mereces recibir un trato empático y amable. «Un* buen* Terapeuta» tiende a dar demostraciones de interés en lo que le dices. Considera cuando le contactes, sus indicadores verbales, no verbales y corporales.
En relación a buenos tratos, quisiera darle el merecido lugar al pago de honorarios. El intercambio equilibrado del servicio (dinero u otra forma de intercambio pactado), es muy importante. No quiero decir con esto, que no se pueda recibir tratamiento gratuito, sino acordar claramente el intercambio del servicio, y así generar un equilibrio sano entre «el dar y recibir». De esta manera evitarás aperturas a la culpa y cualquier posibilidad de abuso de poder.
Un buen trato, también significa que recibas disculpas o explicaciones por impuntualidad, por suspender una sesión, etc. Significa también recibir palabras amables, respuestas amables si tienes dudas y el respeto por tus limites corporales. Ningún terapeuta, del ámbito que sea, puede atribuirse el derecho de enjuiciarte, denigrarte física, emocional, mental o espiritualmente, ni siquiera sutilmente. Si es así no dudes en buscar algo mejor para ti, incluso ten presente que tienes derecho a realizar una denuncia si lo consideras.
Poder personal
Reconocerás un* buen* terapeuta, si estimula durante el proceso el desarrollo de tu propio poder interior. Esto es un objetivo transversal de cualquier terapia. Intenta no apegarte a terapeutas que se llamen a sí mismos, o demuestren muchísimo agrado cuando les llaman «maestros» o «gurúes», etc. Detrás de ello, puede haber un paradigma o modelo acerca de poseer una verdad, una mejor formula y conflictos en el manejo del poder.
También considera, que si un* terapeuta se molesta o rechaza tu decisión de suspender o terminar la terapia, está dando señales importantes de tener problemas con su manejo del poder. Ten en cuenta tu derecho de autonomía durante todo el proceso de atención.
Identificar dependencia
Este es un indicador muy importante en el proceso. Aunque en el encuentro con el o la terapeuta, puedas sentir que te comprende, te ayuda, sus métodos han sido transformadores para ti, estás agradecid*, consideres que sería el padre o la madre perfecta (lo que Freud llamaría transferencia), es trascendental que no te confundas, evites crear dependencia, y traigas tu poder personal de regreso a ti.
Si bien un terapeuta está instruido para enfocarse en ti durante la sesión o proceso, sabrá con claridad acerca de los limites y encuadre de una beneficiosa relación terapéutica. No reforzará que te confundas, ajustará tus expectativas con empatía, te invitará a conversarlo explícitamente para ponerlo al servicio de tu proceso terapéutico.
Encuadre
También es un indicador de ser «un* buen* Terapeuta», aquel que respeta sus espacios de descanso y vida privada (aspecto muy importante para otorgar un buen servicio). Sabrá que si recibe un mensaje tuyo, de tu proceso, entre sesiones (sin que lo acordaran previamente) es preferible que te invite a abordarlo con mayor profundidad en la próxima sesión. En la ética de l*s terapeutas, el límite personal entre consultante-terapeuta es fundamental, y está al servicio principalmente de quien consulta.
Un terapeuta que te invita a salir, aparenta mucha necesidad de estar conectad* entre sesiones, se insinúa sexualmente, está dando indicadores de tener importantes conflictos éticos y estar interfiriendo en un encuadre terapéutico sano.
Para finalizar, quisiera concluir que much*s terapeutas realizan buenas prácticas laborales, centrados en lo humano como punto de partida, con gran dedicación y ética; y también apoyados en un propósito trascendental que da fuerza a su labor. Much*s comprenden que como terapeutas vivimos en un permanente y continuo aprendizaje de nutrición de nuestro servicio; Y también comprenden algo esencial; que nuestro propio desarrollo humano, no está separado de esta nutrición.
Espero que encuentres lo que buscas, y que el o la Terapeuta que elijas contribuya al camino de tu crecimiento interior.
Mónica Paz Guerra Luna
Psicóloga Clínica Adultos
Terapeuta Integrativa
www.monicapazpsicologa.com
26 Octubre, 2020